• Detrás de la noticia, nada. Ensayo sobre la información planetaria

    Traducción: Alejandro Orellana
    244 páginas | Tapa blanda | Formato: 14 x 21 cm.

     

    ¿Cómo se produce la noticia? ¿Cómo se forma nuestra conciencia del mundo a través de las historias de los periódicos y la televisión? ¿Cómo debemos enfrentarnos y reaccionar frente a las noticias con las que cotidianamente los medios de comunicación pretenden enseñarnos cómo está hecho el mundo? Entre la reflexión filosófica y la reconstrucción histórica –desde las mentiras en la guerra de Crimea a las de la antigua Yugoslavia, de Reagan a Berlusconi, desde el telégrafo mecánico a la realidad virtual– este libro contribuye al conocimiento de cómo desmontar los mecanismos de la información y comprender lo que hay dentro del acto de informar.
     

    Detrás de la noticia, nada” relata cómo nace, se desarrolla y muere una noticia. Explica «técnicamente» cómo se puede manipular al lector a través de ella, y cómo un hito científicamente planificado con el news management, se camufla de noticia para inundar la prensa, no dando espacio a preguntas que no se desean responder u ocultar otras que no se quieren investigar.
     

    Claudio Fracassi recorre un camino que desmonta y expone los mecanismos de la información, describiendo cómo se estructura el oficio del periodismo y cómo se ha entrelazado con los tentáculos del poder.

  • La Hermandad de la Casa Grande

    509 páginas | Tapa blanda | Formato: 14 x 22 cm.
    Año de publicación: 2021

     

    Es 1879. Al norte, Chile defiende las inversiones extranjeras en la Guerra del Pacífico. Al sur, más allá de la Araucanía ya invadida, desde una isla grande casi inexplorada se dispersan rumores de violencia, superstición y de un Estado incapaz de imponer su ley.
     

    La élite estaría tranquila si algunos «elementos» que no están ocupados en la frontera con Perú penetraran Chiloé. Necesitan pruebas para condenar a esos delincuentes que aterrorizan a la población con viejas creencias indígenas. Se hacen llamar brujos. Se organizan como La Recta Provincia o La Hermandad de la Casa Grande. Mienten para asustar y cambian los nombres a las ciudades de la isla –Achao, Dalcahue o Quicaví–, confundiéndolas con otras: Buenos Aires, Villarrica, Salamanca.
     

    Si fueran solo mitos, al Gobierno le bastaría con dejar olvidado ese recóndito lugar. Pero quien se hace llamar El Mayor Mentiroso del Mundo asegura haber escapado de los brujos y recorre el norte deslumbrando a los extranjeros: les habla de maleficios, monstruos y asesinatos; de las sangrientas luchas entre clanes para hacerse de un reinado en decadencia. Por esas mentiras, o para asegurar un inestable orgullo nacional, coroneles y tenientes deciden darle fin a cosas que un mortal no tiene el poder de terminar.

  • Teatro peruano en el tiempo del miedo. Estética, historia y violencia (1980-2000)

    264 páginas | Tapa blanda | Formato: 14.5 x 20 cm.

     

    Entre los años 1980 y 2000 el Perú vivió una época de violencia sin precedentes, nacida del enfrentamiento de dos visiones extremistas sobre cómo solucionar los históricos problemas nacionales. Una se tomó el derecho de atacar el naciente orden democrático para instaurar un comunismo mesiánico, de métodos terroristas, ineficiente hasta en sus estrategias militares. La otra, aprovechando la urgencia de respuestas, se ocupó de desaparecer toda forma de oposición ideológica al liberalismo/capitalismo reinante, y se llevó de encuentro poblaciones vulnerables, históricamente postergadas. El resultado fue un tiempo de miedo, —manchay tiempo era llamado en la zona andina— un trauma social todavía perceptible en varias generaciones de peruanos.
     
    Ante este desplome del tejido social, los artistas del teatro se vieron forzados a dialogar con esta realidad angustiante. Sin embargo, muchos de los discursos escénicos sobre y en medio del conflicto armado, no han sido revisados con detenimiento, en una perspectiva de largo plazo, ni se ha establecido su posible influencia en el quehacer cultural posterior. Todavía algunas preguntas parecen pertinentes de formular: ¿Qué dijo el teatro peruano sobre la violencia?, ¿lo dijo bien?, ¿contribuyó a contar una verdad?

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