• El dios del silencio

    110 páginas | Tapa blanda | Formato: 14 x 20 cm.
    Año de publicación: 2023

     

    En El dios del silencio el escritor arequipeño nos lleva a lugares en apariencia idílicos, donde la realidad oculta perturbadoras revelaciones. A través de vueltas y huidas de casa, los personajes enfrentan batallas íntimas y externas, desafiando la memoria y la percepción. Rivera teje misterios que invitan al lector a explorar con un bisturí sus propias incógnitas. Cada cuento es una ventana hacia lo inesperado, donde el silencio revela más de lo que las palabras expresan. Este libro es un viaje hacia lo desconocido, donde la verdad se esconde detrás de cada página

  • La ciudad de los náufragos

    Autor/a:Eduardo Vela

    348 páginas | Tapa blanda | Formato: 13 x 20 cm.
    Año de publicación: 2020

     

    Con un lenguaje que combina la oralidad callejera y una prosa ágil, el autor nos presenta las diversas circunstancias que involucra el camino a la adultez y nos muestra, desde una mirada escéptica, su lado más benevolente o el más pérfido. La historia nos conecta con nuestros primeros recuerdos y emociones, con las tristezas y las alegrías que un chico de barrio puede vivir. El lector asiste a un reencuentro con sueños remotos y amores perdidos, con la belleza y los horrores escondidos en una ciudad donde sus habitantes se debaten entre la frustración crónica y la ciega esperanza.

  • Sonido y acontecimiento

    204 páginas | Tapa blanda | Formato: 15 x 22 cm.
    Año de publicación: 2016

     

    Un pensamiento clásico del sonido no podrá ser el mismo cuando nuestro mundo actual está absolutamente atravesado y ocupado, de manera inédita, por sonidos. De esta manera, el presente libro pretende realizar un ejercicio filosófico a partir de la inquietud que nace de la experiencia de esta actual vida sonora. Este ejercicio liga los sonidos a un pensamiento del acontecimiento totalmente independiente de cualquier algo. Toma como ejemplo permanente las propuestas de John Cage, quien quiso siempre prestar oído u oreja a la actividad sonora, sabiendo que en ningún caso escuchar consistía en apropiarse de los sonidos o apropiarse con los sonidos. No hay, en rigor, propiedad, apropiación, desapropiación de los sonidos: pura libertad del acontecer, pura libertad de la experiencia de la escucha. Al menos, ese es el horizonte, el silencio.

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