• Detrás de la noticia, nada. Ensayo sobre la información planetaria

    Traducción: Alejandro Orellana
    244 páginas | Tapa blanda | Formato: 14 x 21 cm.

     

    ¿Cómo se produce la noticia? ¿Cómo se forma nuestra conciencia del mundo a través de las historias de los periódicos y la televisión? ¿Cómo debemos enfrentarnos y reaccionar frente a las noticias con las que cotidianamente los medios de comunicación pretenden enseñarnos cómo está hecho el mundo? Entre la reflexión filosófica y la reconstrucción histórica –desde las mentiras en la guerra de Crimea a las de la antigua Yugoslavia, de Reagan a Berlusconi, desde el telégrafo mecánico a la realidad virtual– este libro contribuye al conocimiento de cómo desmontar los mecanismos de la información y comprender lo que hay dentro del acto de informar.
     

    Detrás de la noticia, nada” relata cómo nace, se desarrolla y muere una noticia. Explica «técnicamente» cómo se puede manipular al lector a través de ella, y cómo un hito científicamente planificado con el news management, se camufla de noticia para inundar la prensa, no dando espacio a preguntas que no se desean responder u ocultar otras que no se quieren investigar.
     

    Claudio Fracassi recorre un camino que desmonta y expone los mecanismos de la información, describiendo cómo se estructura el oficio del periodismo y cómo se ha entrelazado con los tentáculos del poder.

  • Luna, sol y brujas. Género y clase en los Andes prehispánicos y coloniales

    280 páginas | Tapa blanda | Formato: 17 x 24 cm.
    Año de publicación: 2021

     

    Se trata de un texto vigente para entender la gran importancia de las diversas manifestaciones y creencias de género practicadas en los territorios andinos, primero desde las culturas prehispánicas y luego bajo el colonialismo español, así como las relaciones de poder que se forjaron a partir de esos sistemas de dominación. Este trabajo muestra la trascendencia que tiene el abordaje del enfoque de género en el escenario histórico andino, con la profundidad y amplitud que merece su tratamiento. Y es que el género está articulado a la complejidad socioeconómica y cultural de nuestras sociedades particularmente con los procesos de jerarquización, pérdida de derechos, utilización de la sexualidad y control político e ideológico en las relaciones humanas y las formas de vida. El análisis de la problemática de género debería conducir a visibilizar las intolerancias, inequidades e injusticias estructurales, que parecen normalizar por lo que se ha dado en llamar la colonialidad del poder y por las superestructuras ideológicas, lamentablemente vigentes hasta nuestros días. Es decir, la modernidad y globalización hegemónicas las continúan reproduciendo bajo nuevas formas de dominación y de institucionalización de privilegios y desigualdades.

  • No tengo amigos, tengo amores

    106 páginas | Tapa blanda con solapas | Formato: 17 x 24 cm.
    Año de publicación: 2018

     

    Este libro teje un relato biográfico urdido con la aguda labia de Pedro Lemebel, autor irreductible cuya voz única se deja oír en estas páginas. Forjado con extractos de setenta y dos entrevistas, que se inician a mediados de los noventa y culminan solo meses previos a su muerte, este volumen contiene sus reflexiones políticas y vitales con una transparencia punzante. Porque Lemebel era, antes que todo, un orador desbordante que desestabilizaba a cualquier interlocutor. Dueño de una pluma afilada, barroca, cargada de dardos de certeza e ironía, Lemebel desnudó las heridas y las supuestas glorias nacionales desde la periferia de los cenáculos y camarillas literarias. Su legado es una escritura ineludible y un modelo para comprender la transgresión política desde la teoría del género. Sus opiniones impactaron como un certero gancho izquierdo a la mandíbula de las pulcras conciencias de la transición. No tengo amigos, tengo amores refleja al Lemebel crítico y teórico, que fundía experiencia y política y sospechó siempre de la “cueca democrática”. Un autor que seguiremos leyendo el próximo siglo, que nos habló de frente, sin pestañear: “No necesito disfraz/ aquí está mi cara/ hablo por mi diferencia”.

Menú principal