• Calles militarizadas

    304 páginas | Tapa blanda | Formato: 14 x 21 cm.
    Año de publicación: 2024

     

    En Calles militarizadas, Denji Kuroshima nos da su versión del Incidente de Jinan, un enfrentamiento armado ocurrido en China en 1928 entre el ejército imperial japonés y el ejército chino del sur. Por ese entonces China estaba dividida bajo el control de caudillos militares, explotada por Japón y por las potencias de Occidente. La mirada de Denji Kuroshima en defensa de salarios dignos y mejores condiciones para trabajadores y campesinos le valió la censura tanto del gobierno japonés como de Estados Unidos después de la Segunda Guerra Mundial. Su novela no fue publicada en versión completa hasta 1970, veintisiete años después de su muerte. Calles militarizadas plantea un camino posible hacia un mundo diferente, más humano y pacífico, forjando poderosos vínculos de solidaridad internacional. Esta es su primera traducción al español.

  • Kazimir

    132 páginas | Tapa blanda con solapas | Formato: 13.5 x 21 cm.

     

    El cuestionamiento desordena aves de explotación en la basura de los fractales. Moisés Jimenez extrae vidrio molido de la panza del tiempo. Fig 4: Poema negro sobre fondo gris. Kazimir quebrado, espera. Se larga, esperando.

    Kazimir

    S/ 35.00
  • Mi culo es mío. Mujeres que bailan como se les canta

    160 páginas | Tapa blanda | Formato: 15 x 23 cm.
    Año de publicación: 2024

     

    Si históricamente en los bailes populares censurados las protagonistas eran las caderas, más recientemente el foco de interés se fue desplazando al movimiento y sacudimiento glúteo. Y el trasero, la cola, el culo –las partes bajas del cuerpo en el léxico bajtiniano de lo popular– se fue imponiendo como un signo cultural y político en disputa, atravesado por miradas, debates y experiencias. Modos de bailar de alta densidad erótica como el perreo y el twerking y músicas como la cumbia, el reggaetón, el trap o el electro pop son vistas por muchos como sexistas y degradantes para las mujeres. Sin embargo, en estos años también ganaron visibilidad y aceptación otras miradas impulsadas por artistas que reivindican estas prácticas como formas de reapropiación del goce y la autonomía de los cuerpos. El baile fue tomado por los discursos feministas como un recurso para reivindicar la soberanía sexual, generando un acercamiento novedoso entre las reivindicaciones políticas de género y la exhibición erótica de las mujeres en el ámbito musical.
     

    Este libro propone un recorrido por las músicas panlatinas de origen popular y ascenso masivo y su sincronización con el movimiento Ni Una Menos y las luchas por los derechos de género, desde una perspectiva de crítica cultural feminista. “Mi culo es mío” parafrasea la consigna de los años sesenta Mi cuerpo es mío, que en la lucha contra la violencia machistay por el derecho al aborto legal cobró vigencia nuevamente, resituando discusiones y posiciones del feminismo respecto a la libertad sexual pública expresada en y con la música.

Menú principal