• Érase dos veces

    Ilustrador: Miguel Ortiz
    50 páginas | Tapa dura | Formato: 22 x 22 cm.
    Edad sugerida: +8 años

     

    Los dibujantes, por regla, leen los cuentos antes de ilustrarlos. En esta ocasión ocurrió al revés: el escritor desafió al dibujante: «Dibuja escenas sorprendentes y ambiguas, que sean complicadas de narrar». José Miguel Vásquez propone dos historias totalmente distintas para cada ilustración e invita a sus lectores a continuar el ejercicio de imaginación de manera inversa a la convencional. Érase dos veces se despliega como un díptico narrativo en el que la imagen es la fuente de varios mundos, sugiriendo un proceso creativo que nos abre el imaginario a sus múltiples posibilidades.

     

    Entre escenario y escenario, el lector descubrirá al gonzorruelo escarlata, el perro Dico, la abuela que levita y las ratas Katz y Platz, entre otros. Lector asiduo de cuentos ilustrados desde la infancia, admirador de los relatos cortos de Juan Rulfo y Augusto Monterroso, de la poesía de Oquendo de Amat e inspirado por la artista plástica Rosario Nuñez de Patrucco, José Miguel Vásquez crea personajes con inteligente ternura, y sus aventuras llenas de humor están concebidas para estimular la imaginación no solo de los niños sino también de los adultos.

  • La tortura y el torturador. Perfiles psiquiátricos de agentes de la DINA

    202 páginas | Tapa blanda | Formato: 14 x 21.5 cm.

     

    El psiquiatra Rodrigo Dresdner vuelve a adentrarse en un análisis profundo para realizar un aporte significativo a la comprensión de la mente del torturador. Situándose en la dictadura chilena, periodo histórico en cual la tortura fue institucionalizada y formó parte de una política de Estado, Dresdner caracteriza a la DINA, primera policía secreta del régimen dictatorial de Pinochet responsable de numerosos crímenes de lesa humanidad, para luego centrarse en los perfiles psiquiátricos de tres de sus más siniestros agentes: Manuel Contreras Sepúlveda, Pedro Espinoza Bravo y Armando Fernández Larios.
     

    A partir de material de archivo y testimonios recogidos de primera mano, el psiquiatra nos muestra cómo la selección de los agentes de este perverso organismo de ninguna manera fue azarosa. Al contrario, precisamente fueron rasgos antisociales y psicopáticos los que destacaron en los perfiles de sus integrantes, quienes cometieron los horrorosos crímenes que aún supuran en el cuerpo herido de Chile

Menú principal