• El enemigo del escritor y otros cuentos

    Autor/a:Ah Yi

    110 páginas | Tapa blanda | Formato: 14 x 21 cm.
    Año de publicación: 2023

     

    Esta selección reúne cinco de los cuentos más representativos de la literatura de Ah Yi, reconocido como uno de los mejores escritores chinos en la actualidad.
     
    En esta antología, Ah Yi se vale de extraordinarias técnicas narrativas para reflejar la realidad China contemporánea en sus más sórdidas profundidades: el crimen, la vergüenza, el tedio de una existencia monótona. Sin duda, la escritura de Ah Yi lleva la marca de sus primeros años de formación, y ella es también un recurso para dar cuenta del malestar o la incomodidad respecto de las manifestaciones y el despliegue del proceso de globalización, y su impacto en la vida cotidiana. Este puñado de relatos entreteje el sacrificio hacia la modernidad que experimenta la sociedad China, donde conviven pasado y presente en un diálogo a complejo y anhelante. Ah Yi, ha publicado cinco antologías de cuentos cortos y tres novelas. Sus obras han sido traducidas al inglés, francés, italiano, turco y otros idiomas. En castellano publicó “Una pizca de maldad” y “Despiértame a las 9:00”

  • El nombre del Perú

    90 páginas | Tapa blanda con solapas | Formato: 13 x 20 cm.

     

    El nombre del Perú (1951) realiza un recuento de las diferentes versiones que existen sobre el origen del nombre de nuestro país. Porras sostiene que el nombre del Perú proviene de una deformación del nombre del cacique del Birú, cuyos reducidos dominios se hallaban en la costa del Darién en la frontera entre las actuales Panamá y Colombia. Hasta ahí llegaron los conquistadores en su primer viaje y al que los soldados y aventureros de Panamá decidieron llamar Perú. Así, el nombre del Perú habría surgido de la deformación castellana de un vocablo indígena. En sus conclusiones, el historiador señala: el nombre del Perú fue desconocido para los Incas. Fue impuesto por los conquistadores españoles y rechazado por los indios del Perú, que se negaban a usarlo, según el testimonio de Valera, Acosta y Garcilaso.

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