• El jigre y la tigrafa

    44 páginas | Tapa dura | Formato: 22.5 x 22.5 cm.
    Ilustrador: Percy Kiyabu
    Libro infantil más vendido de la Feria Internacional del Libro de Lima (FIL 2018)
    Año de publicación: 2018

     

    Todos, en algún momento de nuestras vidas, hemos querido ser otro. Porque todos, en algún momento, nos hemos sentido distintos, fuera de lo “normal”. El jigre y la tigrafa es un divertido acertijo que juega con las ocurrencias de aquello que te habría gustado ser, cuando la incomodidad de sentirte distinto te aqueja. En esta historia, el jigre y la tigrafa lamentan su singularidad, pues quisieran ser animales comunes como el tigre o la jirafa. Sin embargo, un paseo por el bosque les ayudará a descubrir que, en realidad, la belleza no sigue normas ni radica en la pureza, sino que se nutre de la mezcla y la autenticidad.

     

    Este libro celebra la diversidad como valor que nos fortalece a nivel individual y nos enriquece a nivel colectivo. Un mensaje de absoluta pertinencia en nuestro país, que aún debe sumar esfuerzos por abrazar la pluralidad (racial, sexual, de pensamiento y elección) para convivir en armonía. Es, así, un paso adelante en el camino del reconocimiento y la inclusión, y en contra de cualquier tipo de intolerancia. Y en ese sentido, precisamente este cuento nació como una lectura de buenas noches que el autor creó para Alai, su pequeña, en su intento por cultivar en ella el amor propio y el respeto por los demás.

  • La farsa poética

    Autor/a:Juan Yufra

    200 páginas | Tapa blanda con solapas | Formato: 13.5 x 21 cm.

     

    La farsa poética/obra poética completa (1998-2018) es un trazo elaborado sobre la arena de la memoria. Un mapa riguroso que Juan Yufra nos ofrece como prueba de veinte años de mares.

    La farsa poética

    Autor/a:Juan Yufra
    S/ 45.00
  • Por qué escuchamos a Stevie Wonder

    96 páginas | Tapa blanda | Formato: 15 x 23 cm.
    Año de publicación: 2020

     

    Del góspel al pop, de la balada al funk, del jazz al soul, Stevie Wonder supo desde muy chico ser fiel a sus orígenes culturales y, al mismo tiempo, lo suficientemente curioso como para asomarse en su música a nuevas expresiones. “El genio de 12 años de edad”, como lo definieron en la célebre discográfica Motown en 1962, desde su primera aparición en un escenario, ciego de nacimiento, logró sortear todos los obstáculos. Casi sesenta años después de aquel debut precoz, nos sigue conmoviendo y animando con sus canciones, su voz y su armónica. En ese derrotero hubo hits y megahits (I Just Called to Say I Love You, Isn’t She Lovely?), obras conceptuales (Journey Through the Secret Life of Plants) y experiencias menos felices. La suma de este variado repertorio, notablemente virtuoso, convirtió a Wonder en un clásico multigénero. Quizá porque, como canta en Sir Duke, el tema que le dedicó a Duke Ellington y a otros grandes del jazz, “la música es un mundo en sí mismo/con un lenguaje que todos entendemos”. A partir de un casete de In Square Circle grabado en su memoria, Edgardo Scott se propuso, con agudeza y erudición, pero sin piedad ni complacencia, “escribir la transformación de un gusto de infancia”. Esa patria que nos formatea para siempre, donde reina la canción.

  • Una rueda dentro de una rueda. Cómo aprendí a andar en bicicleta

    78 páginas | Tapa blanda con solapas | Formato: 14 x 21 cm.
    Año de publicación: 2024

     

    El siglo XIX se despedía con aires de cambio. Expresiones como «igualdad», «libertad», «sufragio femenino», sonaban en las reuniones y en las calles de las grandes ciudades. Pronto, la bicicleta se integró en la revolución feminista y a las campañas de las sufragistas. «Pedalear por el sufragio», se convirtió en una proclama clave que se extendió como la pólvora. Así, el ciclismo pasó de ser una actividad recreativa, a tomar un significado reivindicativo contra las ataduras de la época victoriana. Sinónimo de liberación y de igualdad.
     
    Publicado por primera vez en 1895, Una rueda dentro de una rueda. Cómo aprendí a andar en bicicleta se transformó en todo un clásico. Un fascinante testimonio de la expansión de la bicicleta en el cambio de siglo, y de la libertad que este medio de trasporte ofrecía a las mujeres de entonces. Es también la crónica de una mujer singular: activista por reformas sociales contra el alcoholismo y el sufragio femenino –que afirmaba que las mujeres “deberían poder votar, especialmente si el marido estaba ebrio”–, que aprendió a andar en bicicleta a los 53 años de edad, motivando a las mujeres a superar las limitaciones de su época, y a involucrarse con prácticas que desafiaran su impuesto rol en la sociedad de finales del siglo XIX.

Menú principal